A veces en nuestras
vidas no logramos lo que queremos,
porque simplemente no creemos que las podemos lograr, eso es uno de los
impedimentos más grandes que tenemos, pueda que no sea difícil, pero creer que
no podremos solo te hunde en el fracaso
y en el desgano de ni siquiera
intentarlo, y así te vas acostumbrando a una vida que si bien es cierto no te
agrada llega a ser tu mejor amiga, porque es lo único que tienes y modificar eso implica tiempo, esfuerzo, energía y DECISIÓN, pues
si, decisión para cambiar las cosas y es aquí donde empiezan los problemas,
porque estamos acostumbrados a alimentar las creencias limitantes, que nos
hacen ver la vida de una sola manera, y siempre esa manera será que NO PODEMOS CAMBIAR, peor aún para que
cambiar? Si así estoy bien, no me gusta la vida, tampoco es divertida, pero
para que voy a inventar? Y más si estoy avanzada en edad, digo la famosa frase
venezolana: para donde voy yo con esa
pata hinchada?
Nos acostumbramos tanto
a caminar arrastrando un pie, que no nos acordamos lo maravilloso que era
cuando caminábamos san@s, sin tener que cojear por el dolor que produce la
inflamación en una pierna. Se nos olvida que a veces es mejor cortar la pierna
que cargar con una infectada que poco a poco termine acabando con nuestra vida.
Es el miedo a que nos corten la
pierna lo que nos paraliza y en
ocasiones morimos lentamente sin entender que aun con una sola pierna, podemos
llevar una vida sana, alegre, feliz y lograr satisfacción por los retos que
implica ser una persona especial.
En el caso del
Matrimonio, nos escudamos en que el
matrimonio es sacrificio, que hay que aguantar para que dure, que ya se le
pasará y todo volverá a la normalidad y podría seguir enumerando mil excusas
por las cuales muchas mujeres no se atreven a tomar las riendas de sus vidas,
valorarse como seres humanos, poner su autoestima en su lugar y decidir ser feliz, aunque eso implique estar solas. Son muchas
las mujeres que hoy en día están en situaciones de riesgos, expuestas a que sus
esposos las agredan e incluso las maten producto de un momento de locura, de
agresividad, de alcoholismo, de gritos y son estas situaciones las que van
deteriorando una relación hasta terminar separados emocionalmete y con la autoestima tan baja que olvidan lo
maravillosa que puede ser la vida
Por eso, le digo a
tantas mujeres que hoy se encuentran atrapadas en su propio ser, que ellas
tienen el control cuando decidan tomar las riendas de sus vidas y desprenderse
de todas aquellas creencias que las limitan y que las hacen tan infelices. Aquí
solo 4 de estas creencias:
1-
No podrán salir adelante sin un hombre
2-
Que dirán mis amigos? Familia y demás jueces
de esta sociedad?
3-
Mis hijos me lo reprocharán, no les
puedo hacer eso. Mejor espero que crezcan
4-
Ese Señor me matará si le digo que me
quiero divorciar. ¿Cómo voy a morir? Mejor no invento
Podría hacer una lista
larga, créanme pudiera llenar toda una página, pero de seguro ustedes tendrán
su propia excusa y ahorita estarán haciendo su propia lista. Como buena
investigadora, solo quise enumerar las que más tuvieron puntaje en una encuesta
que hice, a través de conversaciones con
algunas mujeres con experiencia en
divorcio, algunas que desean hacerlo, pero no tiene el valor y otras que
están felizmente casadas.
1.-
Qué no podrán salir adelante sin un hombre? Pues nada más
lejos de la realidad. ¿Acaso no son los
hombres que salen adelante con nosotras las mujeres? No Somos nosotras las que
los cuidamos cuando están enfermos? Las que limpian la casa y le hacen la comida? Las que les damos ánimos
cuando están deprimidos porque les va mal en el trabajo? Y quien crees que los
acompañan cuando tienen que ir al médico y están muertos de miedo? Es a ellos que les cuesta salir adelate sin
nosotras
2.-
Qué dirán mis amigos? Familia y demás jueces de la sociedad? Si realmente gozan de amigos ellos te
entenderán y te apoyarán porque sabrán que si
has tomada la decisión tan difícil de divorciarte, ha de ser por algo.
Tu familia también te apoyará, aunque al principio estén tristes por lo que la
sociedad ha etiquetado como un fracaso. Los familiares de tu esposo siempre
será un enigma. Ellos pueden reaccionar de la forma más inverosímil, pueden
apoyarte o destruirte, por lo general estarán en contra, pero de algo tú debes
estar consiente, que ellos son su familia y su papel es acogerlo con
beneplácito, aunque esto implique un trastrocamiento del equilibrio familiar. Y
los demás jueces de la sociedad deben ser como los mirones, es decir no deben importarte, no deben influirte
no deben juzgarte, porque simplemente no conocen tu realidad, pero debes estar
consiente, que serán los primeros que te van a criticar
3.-
Mis hijos me lo reprocharán, no les puedo hacer eso. Mejor espero que crezcan.
Puedes estar segura que te lo reprocharán si
no tomas la decisión de divorciarte y los obligas a vivir condenados a
un ambiente hostil, donde no hay respeto y no hay buen ejemplo. Los niños no
entienden las situaciones cuando tú no eres capaz de explicarles y los
subestiman pensando que ellos no te entenderán, pues créanme que si lo
entienden y en mi estudio me encontré con muchos hijos que me dijeron que no
entendían porque su mama aguantaba tanto. Que eran inmensamente infelices
cuando sus papas estaban juntos y que ahora han podido rescatar la relación.
Con el tiempo las cosas se equilibran cuando hay madurez en la pareja divorciada y entienden que una
cosa son los hijos y otra cosa su ex pareja. Los más inteligentes han sabido
ser amigos y comparten la alegría de los hijos.
Lamentablemente muchos
padres al divorciarse de su esposa, también se divorcian de sus hijos y no
saben mantener una relación sana con ellos, eso es un indicador que tu decisión
de divorciarte fue la correcta. El tipo no es inteligente y no vale la pena
posponer una decisión que para luego es tarde. Quizás cuando lo quieras hacer,
ya estés enferma, vieja, cansada y amargada y hayas perdido de vivir y darle a tus hijos la alegría de
vivir contigo feliz los mejores años de tu vida. Tus hijos se merecen
disfrutarte en tu esplendor, verte feliz, sana, sonriendo y ofreciéndole la alegría de compartir y
acompañarlos en sus logros, en sus metas y en todas sus experiencias de vida.
La felicidad de ellos no la puedes postergar con esa falsa creencia de que mejor espero que sean grandes para
divorciarme.
4.-
Ese Señor me matará si le digo que me quiero divorciar. ¿Cómo voy a morir?
Mejor no invento. Esta es quizás una de las creencias que
más paraliza a las mujeres para tomar la decisión y más en este mundo cargado
de violencia, pero que a la final
resulta la más sencilla. Cómo se puede matar a una persona que ya está muerta? ¿acaso un muerto puede tenerle miedo a la
muerte? ¡Pues no!. Solo te queda intentar la última
respiración boca a boca, el último electroshock que puede ser quizás muy
doloroso, pero que será el que te devuelva a la vida, el que te de nuevamente
la alegría de respirar sin oxígeno artificial, que pueden ser las pastillas,
porque simplemente sabes que esa vida te
ahoga.
Pero aquí tienes que decidir o sigues muerta
con la vida que lleves o te arriesgas a morir de nuevo planteando el divorcio.
¿pero si en vez de morir de nuevo empiezas a vivir ? Te imaginas estar muerte y
que te den la oportunidad de vivir de nuevo? ¿ La aprovecharías? O simplemente
decides seguir muerta?
Qué difícil es
divorciarse y cuanto miedo da, pero créanme si no están con una pareja que te
apoye, te llene de vida, te potencie como ser humano, te estimule a ser cada
día mejor y ambos disfrutar de la compañía,
pues valdría la pena intentarlo, porque de seguro estarás con una
persona toxica, amargada, triste, que te condiciona a vivir una vida que no es
la que tu quieres y menos la que tú has soñando. ….si estas en este caso:
Atrévete a cambiar de vida, y vivir la vida
que soñaste
Atrévete a liberarte del apego emocional,
Atrévete a vivir la
rica experiencia de la soledad
Atrévete a tomar las
riendas de tu vida
Atrévete
a ser feliz y que no te de miedo!
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